
Con el paso de los días, las rutinas y estrés diario, olvidamos la tarea más importante, que es dedicarnos el tiempo necesario para estar en equilibrio.
Nos dejamos en un segundo plano, anteponiendo las necesidades de los nuestros o los quehaceres, a escucharnos.
Solo tú puedes decidir cuidarte, nadie puede hacerlo por ti.
Por eso queremos recordarte que tú eres importante, y de tu bienestar depende que todo fluya.
Planifica tu semana, de manera que puedas encontrar ese tiempo para ti, para escucharte y conectar. Llegando al equilibrio necesario para afrontar tu día a día, siendo tú la mayor de tus prioridades.
Hay varios tipos de autocuidado, hoy hablaremos de ellos y vamos a compartir algunas formas de practicarlos en tu dia a dia de manera sencilla.
Tipos de Autocuidado
Físico, emocional, cognitivo y social

Físico
Nuestro cuerpo, nuestro templo, y todo lo que eso conlleva.
Una alimentación saludable, cuidar nuestro aspecto físico, tratar las alteraciones de nuestra piel, hacer ejercicio, etc. Todas estas son formas de autocuidado físico.
Practica ejercicio físico. Mantendrás tu cuerpo activo, mejorarás tu bienestar y reducirá tus niveles de estrés.
Alimentación sana y equilibrada.
Dormir bien, descansando 8h. Intenta acostarte temprano y madrugar. Notarás un extra de energía y te resultará más llevadero las tareas y compromisos diarios.

Emocional
Escuchar nuestra alma, sanar por dentro para brillar por fuera.
La salud y la belleza en ayurveda se gestiona desde una gestión emocional, mente equilibrada para un cuerpo sano. Así como los alimentos son la forma de sustento del cuerpo, los pensamientos lo son para la mente. Por eso es importante cultivar pensamientos positivos.
Medita unos minutos todos los días, tu mente desconectará y se sentirá más aliviada.
Da las gracias, puedes llevar un diario de gratitud. Visualizar de forma escrita todas las razones por las que puedes dar gracias.
Pasa tiempo en la naturaleza admirando la belleza que te rodea.

Cognitivo
Ejercitar nuestro cerebro, mantenerlo activo y estimular nuestra parte más creativa es una forma de autocuidado.
Lee un libro que te guste.
Pinta o dibuja, es una manera de despertar tu lado más creativo.
Aprende algo nuevo que te cause curiosidad.
